Las vacaciones son
un buen momento para parar aunque raras veces lo consigamos. Planeamos nuestro
descanso igual que planeamos nuestras actividades diarias para aprovechar al
máximo nuestro tiempo libre. Es cierto que en nuestro tiempo de descanso pese a
hacer muchas actividades tenemos la oportunidad de desacelerar el ritmo
frenético que nos imponemos durante el resto del año. Ahora que disponemos de
tiempo libre parece un buen momento para incorporar nuevas rutinas a nuestro
día a día que nos permitan sacarnos el máximo partido. Por eso vamos a repasar
los beneficios que podríamos obtener de la práctica de mindfulness.
La Asociación Española
de Mindfulness y Compasión define el mindfulness como:
“una palabra inglesa de difícil
traducción al castellano, al que se ha vertido como Atención plena o Conciencia
plena. También podría decirse: atención consciente o atención vigilante,
contemplación,…,
designa un conjunto de
prácticas o ejercicios mentales que tienen en común el fijar la atención en el
momento presente, sin juzgar y con una actitud bondadosa o amorosa hacia el
objeto que se contempla.”
El objetivo del mindfulness es que
aprendas de tu experiencia sin ningún tipo de interferencia.
¿Qué beneficios aporta?
Aporta concentración, calma,
serenidad y paz. Se consigue gracias a la capacidad de separar la realidad de
la interpretación que hacemos de ella y de cómo nos sentimos ante este proceso.
La atención plena es el antídoto para la duda y la inquietud.
Genera buena capacidad de hacer
frente a emociones y situaciones negativas. La atención plena y la compasión por
uno mismo es la solución para la irritación y el rechazo. Genera empatía y permite
el restablecimiento del equilibrio emocional. Favorece los estados de ánimo
positivos. Nos permite estar conectados con nosotros mismos y nuestras
emociones.
Facilita el conocimiento de uno mismo
a través de la comprensión de la propia experiencia. Fomenta una actitud básica
de respeto y amor hacia sí mismo y hacia todos. Al generar empatía y practicar
la bondad nos acerca más a los otros.
La práctica de mindfulness es un
hábito que puedes incorporar a tu vida, igual que incorporas ir al gimnasio o
quedar con amigos. Cuanto más lo practiques, más beneficios generará en tu y en
todas las personas cercanas. ¿Te atreves a practicar?
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